Las autoridades locales se vieron desbordadas por la magnitud del evento. La respuesta inicial fue lenta y desorganizada, dejando a muchos vecinos a su suerte. Los centros de evacuación se vieron rápidamente saturados y la asistencia a los damnificados fue insuficiente.
La mala ejecución de las obras en la autovía de la ruta 12 señalan que se generarán problemas de infraestructura, hidráulicos, urbanísticos y viales en la ciudad a raíz de un defectuoso planeamiento en los 12 kilómetros de calzada.
En la oportunidad alertó que el proyecto no podía continuar de la manera que estaba diseñado ya que traería problemas de anegamiento para los vecinos de Corrientes.
La obra de la autovía 12 lleva un año sin avances. Los trabajos se detuvieron en febrero de 2023 y desde entonces nadie se ha hecho cargo de una obra clave para Corrientes, que se inició en 2017 y que seis años después se erige como la vergüenza nacional.
Una de las problemáticas más importantes es que no se tuvieron en cuenta problemas técnicos tales como la eliminación de los ductos que iban sobre el carril central de la autovía. Según señala el secretario comunal, no se respetaron las cotas de niveles para que el agua corra de norte a sur en el lugar. Esto implica que los barrios Bejarano, Molina Punta, Merceditas Collante, San Gerónimo, Universitario y otros 3 más tendrán inundaciones.
Esta catástrofe natural no es un hecho aislado. Las inundaciones son un problema recurrente en la ciudad de Corrientes, que se ha visto agravada en los últimos años por la falta de inversión en infraestructura y la ausencia de un plan integral de gestión del riesgo hídrico.
La comunidad se encuentra ahora en estado de shock e incertidumbre. Las familias damnificadas necesitan asistencia urgente para poder rehacer sus vidas.
