Los sueldos no logran seguir el ritmo del aumento de precios en bienes esenciales
Durante el pasado mes de diciembre, una familia típica compuesta por dos adultos/as y dos niños/as enfrentó la necesidad de contar con un ingreso mensual de $473,565.32 para cubrir la Canasta Básica Total (CBT) y evitar caer por debajo de la línea de pobreza. Para asegurar la alimentación básica y superar la indigencia, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) requería $224,438.54.
Este preocupante panorama se desprende de un exhaustivo relevamiento llevado a cabo en más de 300 establecimientos distribuidos en seis localidades de la provincia, entre ellas Corrientes Capital, Empedrado, Goya, Santa Rosa, Curuzú Cuatiá, Monte Caseros y Bella Vista.
Los resultados del estudio revelan incrementos significativos en los precios, oscilando entre el 36% y el 120% en productos esenciales como carnes, mercadería básica, combustibles e incluso alquileres, que experimentaron un alarmante aumento del 350% en el transcurso de este año.
Este aumento desmedido impacta directamente en la calidad de vida de las familias, destacando la necesidad urgente de abordar la crisis económica que atraviesa la sociedad. La responsabilidad del Estado se vuelve fundamental en este contexto, exigiendo medidas que mitiguen la presión económica sobre los hogares y promuevan la estabilidad social. En este escenario crítico, se aguarda la implementación de políticas públicas efectivas que garanticen un acceso equitativo a los servicios esenciales y a una alimentación saludable para todos los ciudadanos
