El incremento del kilo vivo en Cañuelas alcanzó al 20% el último viernes. Los especialistas advierten por un inminente traslado a las carnicerías y a los supermercados.
El precio de la carne tuvo un salto de hasta 20% en el mercado de hacienda de Cañuelas antes del fin de semana, que se trasladará muy pronto a las carnicerías y las góndolas de los supermercados. Se trata de un ajuste explicado por las últimas medidas tomadas por el Gobierno; puntualmente el nuevo “dólar maíz” de $340 que le pone una presión adicional al mercado de la carne vacuna, el pollo y los huevos, entre otros rubros.
Lo relevante es que esta última iniciativa pone punto final a la relativa estabilidad en el precio de la carne, que viene corriendo bien por detrás del resto de los alimentos. El kilo de asado, por ejemplo, se encareció 67,9% en los últimos 12 meses contra el 116,9% que subieron los alimentos en el mismo período. En el caso de la paleta, otro de los cortes populares, el alza interanual fue del 73,4%.
El caso del pollo y de los huevos fue diferente -ahí las subas estuvieron más en línea con el resto de los alimentos-, pero eso no impedirá que haya nuevos reacomodamientos en los precios en las próximas semanas.
El último reporte de la consultora Equilibra -dirigida por el economista Martín Rapetti- hizo una estimación sobre el impacto del “dólar maíz” en el precio de los alimentos.
“Impacta significativamente en los precios de los alimentos porque este es el principal insumo utilizado para la cría de animales afectando rubros sensibles como Carnes y derivados, Leche productos lácteos y huevos, y Aceites y grasas, que en conjunto pesan más de 13% en el IPC Nacional. El set de medidas tendrá un impacto de dos puntos” en el índice de precios, estimaron los economistas de Equilibra.
La única incógnita es qué parte de este incremento en el mercado mayorista se trasladará a los comercios minoristas. Y si el eventual ajuste impactará en el nivel de consumo de la población.
¿Se recalienta la inflación tras el acuerdo con el FMI?
El movimiento de los precios de las carnes es uno más de los que vendrán en las próximas semanas. Las principales empresas de la alimentación ya evalúan el impacto en sus costos de las últimas medidas.
Sobre todo en los insumos importados y en los fletes, que desde la semana pasada tienen un recargo adicional, como parte de las medidas acordadas con el Fondo Monetario.
Por ahora, las distintas consultoras que miden la inflación estimaron que la inflación de este mes cerrará en torno del 6,5% a 7%, algo por encima de junio.
El mayor impacto de las últimas medidas se evidenciará a partir de agosto, ya con las PASO transcurridas.
Una buena
Las exportaciones argentinas de carne vacuna crecieron durante el primer semestre del año 8,7% respecto al mismo período de 2022, al alcanzar las 327.200 toneladas peso producto, según consta en un informe del mercado ganadero RosGan. Si bien este cierre con incremento en los despachos entre enero y junio era previsible debido al aumento constante mes a mes del volumen embarcado, lo que sí resultó una sorpresa es que Argentina fue el único país del MERCOSUR que creció en este aspecto.
“Aun con un mercado plagado de regulaciones y un diferencial cambiario sumamente desventajoso para operar, la Argentina ha logrado posicionarse en este primer semestre del año como el único país de la región en incrementar sus exportaciones de carne vacuna. Mientras el resto de los países como Brasil, Uruguay y Paraguay retrocedieron en términos de volumen embarcado, las exportaciones argentinas registraron una mejora de casi 9 puntos en relación a lo exportado en igual lapso, un año atrás”, marcó el informe.
De esta manera, y según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) relevados por el RosGan, Argentina embarcó 26.000 toneladas peso producto más que en el primer semestre de 2022 y completó 327.200 toneladas en total despachadas. Esto contrasta con la realidad de Brasil, cuyas exportaciones cayeron 5%; Uruguay, que tuvo una merma del 20%; y Paraguay, con un retroceso del 7%.
Según explicó el trabajo, “faenas más elevadas en nuestro país como consecuencia de la seca han generado una mayor oferta de carne vacuna durante este primer semestre del año” y “si bien el mercado doméstico ha absorbido buena parte de este incremento, la exportación también logró captar un mayor saldo exportable que, en parte, es lo que le está permitiendo a la industria amortiguar los crecientes costos de operación”.
Por su parte, el vicepresidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (IPVVA), Daniel Urcía, explicó que “Argentina tiene una integración entre el abastecimiento al mercado interno y la exportación consolidado, del 70/30. Este año no solo se creció en volumen en cuanto a la exportación, sino también en el mercado doméstico, con el efecto sequía detrás de esto, con la salida anticipada de algunas vacas a exportación y categorías jóvenes al consumo doméstico”.
En el mediano plazo, Urcía no ve un mayor crecimiento en los despachos, sino que “hay que trabajar en los planteos que estamos haciendo a largo plazo. Es lo que intentamos hacer desde las entidades, que es acordar con los candidatos y con el gobierno futuro una estrategia sostenida para el sector. El crecimiento solo va a estar a largo plazo, pero la potencialidad del sector es clara”.
Fuente: Agencias de Noticias y Medios Digitales
