En medio de la crisis económica en Argentina, creció la migración en búsqueda de oportunidades laborales temporales en tierras brasileras. Un grupo integrado por ocho hombres, provenientes de Colonia Santa Rita, se sumergieron en la experiencia de la llamada “migración golondrina”, dedicándose a la cosecha de uvas en Brasil.
Según señalaron Héctor Almua y Matías Núñez, pertenecientes al grupo migrante, a pesar de la temporalidad de su labor, esperan mejorar sus vidas y las de sus familias a través de esta oportunidad en tierras brasileñas.
Explicaron que en el transcurso del mes de enero, nació la posibilidad de trabajo temporal en la recolección de uvas en el municipio de Flores da Cunha. Este periodo de cosecha tiene una duración de aproximadamente dos meses, desde mediados de enero hasta finales de febrero.
“Confiaron en nosotros, son amables, atentos, serviciales; no tenemos quejas. Nos proveen de uniformes y nos ubicaron en una casa con todas las comodidades. Nos dan el desayuno, almuerzo, merienda y cena”, destacó Almua.
Además, el trabajador subrayó que ingresaron a Brasil con CPF (trámite que habilita el trabajo extranjero), contrato de trabajo, con seguro de accidentes, tienen jornadas de 8 horas diarias y cuentan con la posibilidad de realizar horas extras.
Matías, otro trabajador que se sumó a esta travesía, explicó que el traslado hasta el lugar estuvo a cargo de los empleadores. “Cruzamos por Alba Posse y nos estaban esperando del otro lado del río (Uruguay) en Puerto Mauá, el traslado a esta ciudad corrió por cuenta del dueño y con promesa de volver de la misma manera”, explicó el joven.
Núñez elogió la atención recibida en Brasil y la consideró única, expresando su satisfacción por la experiencia y la posibilidad de realizar horas extras para aumentar sus ingresos. Por su parte, Almua afirmó que “con horas extras, se puede ganar como un millón de pesos limpios al mes”.
