Durante la carrera final de la quinta fecha de los pilotos titulares de la Copa Fiat 1.4 del Misionero de Pista, disputada en el Autódromo de Posadas, los pilotos Gustavo Grün y Nicolás Rojas tuvieron un fuerte accidente en la vuelta 6, que provocó la neutralización de la prueba y el ingreso del auto de seguridad.
El eldoradense Grün tuvo pérdida de conocimiento y tuvo que ser trasladado en ambulancia al Hospital Escuela Ramón Madariaga de Posadas donde se encuentra internado en terapia intensiva con pronóstico reservado, bajo la cobertura de la Asociación Argentina de Volantes (AAV).
El parte médico del paciente dado a conocer esta mañana por el delegado regional de la AAV Eduardo Álvarez indicó que: “Se encuentra en terapia intensiva. El bazo, que era la mayor preocupación de los médicos ayer cuando llegó al hospital, está entero, conservado. Los pulmones están comprometidos, con presencia de coágulos de sangre, por lo que tiene asistencia respiratoria mecánica, sedado y en coma farmacológico. Tiene varios traumatismos (golpes), pero respondió bien a los estudios realizados en el cerebro, columna, no hay lesiones óseas. Va a seguir en terapia intensiva bajo observación. Está controlado y medicado”.
“Estamos acompañando a la familia desde el domingo, vine por pedido del Automóvil Club Misiones (ACM) y mañana a las 11 daremos otro parte médico sobre su estado. También ya se pidió el avión sanitario si la familia pide el traslado a Buenos Aires”, agregó Álvarez.
El mal momento del Resquín Competición
El Resquín Competición, equipo que atiende el auto de Gustavo Grün pasó un mal momento el domingo, ya que luego del choque en pista que provocó la internación de Grün, la Policía de Misiones, por orden del juzgado de turno, fue al Autódromo de Posadas con el objetivo de secuestrar el auto. Se hizo presente en el lugar personal de la comisaría 15ta y personal de criminalista pensando que se trataba de un accidente automovilístico civil.
Los integrantes del equipo intentaron por todos los medios explicarles a los oficiales que se trataba de una competencia deportiva y que fue un “toque de carrera”, el personal de la fuerza en vez de entender la situación, pidió refuerzos que llegaron con armas largas queriendo secuestrar el Fiat 600 de competición. Luego de varias horas y llamados con el juzgado finalmente las autoridades policiales tomaron las fotos de rigor y liberaron al equipo para que puedan volver a Eldorado.
