Sir Nils Olav III es el nombre oficial del ave que cuenta con el tercer rango más alto en las fuerzas del país escandinavo. El acto forma parte de una tradición que se remonta a la década de 1960.
El pasado lunes 21 de agosto, el pingüino Sir Nils Olav III fue nombrado General de División de la Guardia del Rey de Noruega y es el único en el mundo en poseer el rango más alto en las Fuerzas Armadas de ese país. En el zoológico de Edimburgo, se llevó a cabo la ceremonia que involucró a 160 militares y espectadores.
Si bien para muchas personas el acto es algo inusual, se trata de una particular tradición que lleva a cabo el país nórdico desde 1961. En aquel entonces, cuando la Guardia del Rey visitaba la capital escocesa, el teniente Nils Egelien vio una especial similitud entre el caminar de los uniformados con el de las aves.
Más tarde, en 1972, los guardias visitaron la reserva nuevamente y tomaron la decisión de adoptar como mascota al primero de los pingüinos: Sir Nils Olav I -abuelo del actual condecorado Barón de las Islas Bouvet- nombrado así por el teniente y por el Rey Olav V.
En imágenes que difundió el zoológico escocés se puede ver al ave, quien ya era brigadier, junto a la banda musical de la realeza y al equipo del Royal Edinburgh Military Tattoo. Sir Nils Olav III fue nombrado General de División de la Guardia del Rey y los miembros de la fuerza le otorgaron insignias, las cuales portó con orgullo en una de sus alas.
Respecto de la ceremonia que se llevó a cabo en conjunto con Penguins Rock, una organización benéfica cuyo objetivo es la conservación de la fauna silvestre, el sargento Fredrik Gresseth detalló que “su ascenso en este mes de agosto es por buena conducta y por ser un magnífico ejemplo para el resto de pingüinos del Zoológico de Edimburgo. Esto supone un hito en su carrera como mascota de la guardia”.
Por otro lado, el director ejecutivo de la Real Sociedad Zoológica de Escocia, David Field, indicó que este “es un momento de mucho orgullo y representa la estrecha colaboración continua entre nuestros dos países, Escocia y Noruega”.
Desde el nombramiento oficial de los pingüinos como mascotas del linaje real noruego, la relación entre estos se ha fortalecido. Tal es así que, en cada oportunidad de visitar la capital escocesa, los militares han ascendido de rango a las simpáticas aves. Asimismo, ha trascendido que, en épocas navideñas, los animales reciben tarjetas con saludos e incluso les envían pescado en varias oportunidades.
Fuente: Los Andes
