Actualmente hay una recompensa de $3 millones de pesos para quien brinde información sobre su paradero del joven desaparecido desde 2017, en Resistencia.
El camionero que aseguró haberlo a la vera de la ruta 11, cerca de la localidad santafesina de Las Garzas, mostró inconsistencias en la descripción que hizo del joven, además de que la camioneta donde habría estado el joven no quedó registrada en las filmaciones de las cámaras de seguridad.
El dato que arrojó un camionero oriundo de Fontana sobre donde podría estar Elvis Benítez, el joven desaparecido desde diciembre de 2017, reactivó una causa que parecía dormida. Sin embargo, las inconsistencias que arrojó su declaración sumado a la falta de imágenes de la camioneta roja donde presuntamente estaba Elvis comenzaron a resquebrajar su testimonio al punto que se piensa que todo fue una fábula.
El 17 de octubre pasado, un chofer de camión oriundo de Fontana llamó a la policía para informar sobre un dato que parecía importante. Relató que a unos 10 kilómetros de la localidad santafesina de Las Garzas observó a la vera de la ruta una camioneta Ford Ranger color roja desde donde hacían señas. Paró la marcha y se acercó para que ver qué ocurría. El conductor de la camioneta le dijo que había pinchado y que necesitaba un gato para realizar el cambio de rueda.
Mientras realizaba la reparación, supuestamente se percató que dentro del vehículo habían otras dos personas más, entre ellas Elvis Benítez. “Yo soy Elvis Benítez, por favor avisá al Chaco que me busquen en San Javier, Santa Fe. Me tiene Carlos”, dijo el joven, según los dichos del camionero a la policía.
La División Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas solicitó colaboración a la Comisaría Primera de San Javier en Santa Fe, proporcionando fotografías y datos recientes de Benítez. Además, se hizo un identikit con el que sería el rostro actual de Elvis y también el del chofer de la camioneta.
Sin embargo, toda esta escena pareciera que no fue cierta y que de hecho nunca ocurrió. Según pudo saber CHACO DIA POR DIA, el chofer del camión ratificó una y otra vez que era Elvis quien había hablado con él, pero al preguntársele por el color del cabello del joven dijo que era totalmente negro. Este dato no coincide con la realidad ya que Elvis tiene un gran mechón blanco producto de un lunar de nacimiento.
Otro dato que contradice el relato del chofer es la existencia de la presunta camioneta roja. De acuerdo a los videos de las cámaras de seguridad a los que tuvo acceso la Policía y que también fueron vistas por Erica Romero, mamá de Elvis, en ningún momento aparece tal vehículo el día y la hora que fue informado.
“En una reunión con el fiscal adjunto y la división de busqueda de personas me mostraron todo lo que se hizo para dar con esa camioneta que parece ‘fantasma’”, escribió este jueves Erica Romero en su cuenta de Facebook.
“Vi todas las imágenes de la cámaras donde solo se ve pasar el camión, desde donde para en Basail por un instante y sigue su andar. Los horarios de las cámaras no coinciden. Por suerte varias la captaron. No tiene idea de lo que esto me causo. Y sigo manteniendo lo que siempre dije y espero estar equivocada”, agregó.
Cabe recordar que la recompensa para quien brinde datos sobre el paradero de Elvis es tentadora. El gobierno del Chaco ofrece dos millones de pesos y la Nación, un millón más. No resulta extraño que por este motivo lluevan pistas falsas y datos erróneos.
Al momento de su desaparición, Elvis tenía 18 años y era papá de un bebé de tres meses. Lo vieron por última vez en la mañana del 22 de diciembre de 2017, cuando un amigo de nombre Guido lo acercó en bicicleta hasta la parada del colectivo, en avenida 9 de Julio y calle 8. Debía tomar el micro que lo llevaría hasta la casa de su abuela, por 25 de Mayo, casi ruta 11. Pero nunca llegó.