El traslado de los carritos gastronómicos que durante más de tres décadas ocuparon la costanera General San Martín de Corrientes generó opiniones divididas entre los vendedores. Mientras algunos expresaron satisfacción por el nuevo espacio proporcionado por la Municipalidad debajo del puente General Belgrano, otros manifestaron preocupación y críticas, especialmente por la inseguridad en el nuevo lugar.
Carlos, quien había trabajado 22 años en la costanera, expresó su satisfacción con el nuevo espacio. Sin embargo, no todos comparten su perspectiva. Oscar del Castillo, propietario de uno de los carritos, compartió su preocupación, destacando la falta de diálogo con el intendente y la falta de condiciones adecuadas en el nuevo sitio.
“Queremos un diálogo con el señor intendente para entender por qué nos piden que nos retiremos”, expresó del Castillo. Además, señaló la preocupación por la inseguridad en el nuevo lugar y la falta de argumentos por parte del Municipio para justificar el traslado.
A pesar de presentar notas firmadas por los propietarios de los carritos, el intendente no ha dado respuestas. Del Castillo mencionó que se presentaron unos 12 amparos ante la Justicia para detener el cambio de ubicación.
El plazo establecido por la Municipalidad para el traslado venció ayer, con unos 15 comerciantes aceptando la mudanza y otros continuando con los reclamos.
La incertidumbre y la preocupación persisten entre los vendedores gastronómicos, quienes esperan una resolución equitativa por parte de la Justicia.