El Índice Barrial de Precios (IBP) de Corrientes, correspondiente al mes de mayo de 2024, reveló que la Canasta Básica Total (CBT) experimentó un aumento mensual del 4,97 por ciento, mientras que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) tuvo un incremento del 2,14 por ciento. Este informe, elaborado por el Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana (Isepci), destaca una preocupante realidad económica en la provincia.
La CBT, que incluye alimentos y servicios esenciales para el bienestar familiar, alcanzó un monto de 736.205,39 pesos para una familia tipo de dos adultos y dos niños, representando un aumento anual del 263,39 por ciento en comparación con mayo de 2023. Por otro lado, la CBA, que cubre solo los alimentos básicos necesarios para una alimentación mínima, tuvo un costo de 331.624,04 pesos, significando un aumento anual del 265,03 por ciento respecto al mismo mes del año pasado.
En solo cinco meses, desde diciembre de 2023 hasta mayo de 2024, la CBT ha aumentado un 55,46 por ciento, mientras que la CBA ha incrementado un 47,76 por ciento. Estos datos reflejan la severa inflación que afecta tanto a la capital como al interior de la provincia, complicando aún más la situación económica de las familias correntinas.
Estos datos generan importantes preguntas y comentarios entre los correntinos: ¿Cómo se puede sostener una familia con estos costos tan elevados? ¿Qué medidas está tomando el gobierno provincial para aliviar esta situación? ¿Cómo se compara esta realidad con la del resto del país?
La situación en Corrientes no solo afecta a la capital, sino que el interior de la provincia enfrenta dificultades similares o incluso mayores. Las comunidades rurales y pequeñas localidades, donde los ingresos suelen ser aún más bajos y las oportunidades económicas más limitadas, sufren de manera desproporcionada.
La comunidad correntina espera que las autoridades tomen acciones concretas para aliviar la carga económica que enfrentan las familias. Es crucial que se implementen políticas que frenen la inflación, aumenten los ingresos reales de los ciudadanos y aseguren el acceso a servicios esenciales a precios justos. Además, se necesita una estrategia para apoyar a los sectores más vulnerables y fomentar el desarrollo económico en toda la provincia.
Corrientes enfrenta un desafío monumental, y es imprescindible que tanto los ciudadanos como los gobernantes trabajen juntos para encontrar soluciones que aseguren un futuro más próspero y equitativo para todos
